El banquetazo

Don Cayetano, el sabor de la generosidad

Este peculiar taquero prepara excelentes guisos, es un gran conversador y lanza iniciativas de servicio social

Juan Carlos Núñez

Taco de chicharrón Foto: JCN

Desde que tengo memoria conozco a Don Cayetano. Es mi primo y desde hace cinco años se convirtió en uno de los taqueros más peculiares de esta ciudad. No sólo por el delicioso sabor de sus tacos, sino por los juegos e iniciativas sociales que impulsa desde su puesto situado debajo de un frondoso ficus junto a las vías del tren.

Don Cayetano, primo mayor, nos llevaba a los más chicos en su carro a atropellar ratas que pululaban los sábados muy temprano en las calles aledañas al tianguis de los viernes. Nunca logramos aplastar a ninguna, pero nos divertíamos mucho. También nos ayudaba a hacer experimentos y construir túneles en terrenos baldíos.

Ingeniero químico de profesión, decidió en 2013 convertirse en taquero. “Es el trabajo muy divertido”, dice sonriente mientras vuelca una enorme cucharada de mole sobre dos tortillas. Una joven estudiante de medicina que devora un taco de chicharrón, una de las especialidades de Don Cayetano, asiente con la cabeza. Está acompañada por varios de sus compañeros. Cuando se pasa el bocado dice: “Venimos desde el Ángel Leaño. Él es de Texas y no le gusta comer en la calle, solamente aquí. Al principio no me querían acompañar, pero ahora vienen sin mí”.

Don Cayetano. Foto: Juan Carlos Núñez.

Cuando he ido a su puesto, encuentro a Don Caye, como le dicen sus clientes, en animadas conversaciones con ellos. “Viene mucha gente y casi todos regresan. Se platica muy a gusto”, no acaba de terminar la frase cuando llega un señor medio calvo y pide una quesadilla “como la de ayer”. Entonces despliega una enorme tortilla de harina sobre la que pone queso y una cantidad impresionante de rajas.

Los tacos de Don Cayetano llevan una embarrada de frijoles refritos, “receta de la familia de Don Calixto, un ranchero de Zapotlanejo”. Los rellenos son: Papas con chorizo, barbacoa, mole, bistec con papas, chicharrón guisado, chicharrón seco, carne con chile pasilla, lengua, rajas. Para las doraditas, la tortilla con queso y frijoles se queda un rato en el comal y se corona después con cualquiera de los guisos. “Preparo comida casera, de mamá ocupada que tiene que cocinar con sencillez, pero muy rico”.

Cubierto con su ya emblemático sombrero, Don Caye cuenta que ha ido aprendiendo de los clientes. “A mí casi no me gusta el picante, así que al principio no le ponía chile. La gente me reclamaba: queremos enchilarnos. Entonces diseñé tres salsas que tienen como objetivo que los que quieran se enchilen y mucho”. Una de las salsas es de habanero con chile de árbol, otra de chile serrano molido con un poco de agua y sal; y una más de cebolla morada con habanero y limón. Buenísimas las tres. Por supuesto que también están las que no pican, de jitomate y tomate, para gusto como el de él.

Los tacos bien servidos de Don Caye. Foto: JCN

Además del sabor, la abundancia con que sirve es característica de Don Cayetano. Yo soy cliente asiduo de los más diversos puestos de tacos y nunca había visto lo que ya dos veces me ha tocado ver aquí, a dos clientas que le han dicho: “No le ponga tanto relleno a mis tacos”.

Pero lo que hace especial a Don Cayetano no son solamente sus tacos sino también su generosidad, su convicción de que la mayor parte de las personas son buenas y de que todos podemos hacer algo por los demás.

Si usted después de donar sangre va a comer tacos de Don Cayetano, no paga. En otras ocasiones el pago por la comida se hace con dulces o juguetes que son donados a casas hogar y ha habido también algunas veces en que lanza la campaña “tacos con causa” donde lo recaudado se destina a apoyar a personas enfermas.

Además, bajo la premisa de que hay también que divertirse, Don Cayetano organiza cada año, para el Día de Muertos un concurso de calaveritas sobre sus tacos. Muchos de sus clientes participan con ingeniosos y simpáticos versos. El premio para los ganadores es comer gratis.

Rica comida y animada conversación. Foto: JCN

Ubicado en un transitado cruce de caminos, el puesto se convierte también en un centro de información. En el rato que estuvimos ahí, pasó una mujer preguntando por el consulado de Tailandia y un grupo de jóvenes que buscaban una oficina del Registro Civil. Además de un par de automovilistas que a la pasada lo saludaban: “Adiós, don Caye”.

Próximamente abrirá un local, cerca de ahí, en que venderá por la tarde y noche burritos: “Don Cayetano arriero”. Además de los guisados de los tacos ofrecerá de machaca, chilorio y un especial de tocino y queso.

La frondosa sombra de un árbol, una sombrilla, cinco banquitos, un par de mesas y un carrito cobijan el quehacer de este peculiar taquero que es, sobre todo, un hombre bueno.

Los datos

Fundado en: 2013.

Precios:  Tacos $14. Burritos $40. Aguas frescas $12.

Dirección: Giovanni Papini 250. Local c15 Jardines Vallarta. Casi esquina con av. Inglaterra.

Horarios:  Lunes a viernes de 9:00 a 15:00 horas. Cerrado en días festivos y puentes.

Facebook: Don Cayetano https://www.facebook.com/tacoscayetano/

*Nota: Estos datos están actualizados a la fecha de su publicación.

 

También te podría interesar

No hay comentarios

    Deja una respuesta

    Este sitio esta protegido por reCAPTCHA y laPolítica de privacidady losTérminos del servicio de Googlese aplican.