Esta es la crónica de un breve e intenso viaje a la población alteña en el que pudimos gozar de su gastronomía y de su arte
Juan Carlos Núñez Bustillos
Después de un intenso y emotivo día de recorrido cultural por Arandas, Jalisco, llegamos al atardecer al rancho El Ocote donde nos acogió la generosidad de la familia Muñoz Rodríguez. Una pequeña milpa sembrada con maíz, chilacayota y tomate nos daba la bienvenida y era el simbólico preludio de lo que vendría luego: una elotada alrededor de la fogata y un delicioso desayuno ranchero al día siguiente.