Tortas ahogadas de antes
Fotografía: Juan Carlos Núñez
María Hilaria
Me gustaría hacer una remembranza de las tortas ahogadas, plato emblemático de estos rumbos.
Las tortas, como todo en la cocina, han sufrido modificaciones a lo largo del tiempo, acomodándose a modas y gustos.
Recuerdo que había tortas ahogadas y medio ahogadas. No llevaban frijoles ni cebolla desflemada, únicamente la salsa de chile. La salsa de jitomate sin picante es una adquisición nueva y, creo, bienvenida.
El señor tortero cogía con dos dedos el birote y lo sumergía en la salsa picosa, lo ponía en un trozo de papel de estraza y ya estaba.
Se acompañaban de una cerveza bien fría o con un tepache con su pizca de carbonato. Así se bajaba el picor que te llegaba hasta el alma sin disimulos.
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